9 hábitos para disfrutar de una buena digestión

Conoce los 9 hábitos para disfrutar de una buena digestión. A la hora de comer no sólo importa lo que comemos, sino también la forma en que lo hacemos. Los nuevos tiempos que corren nos puede afectar también en nuestra salud y comer deprisa puede provocar una mala digestión que a la larga se puede convertir en un problema de salud.

Algunos de los consejos que suelo recomendar a la hora de sentarnos a comer y disfrutar mientras lo haces son los siguientes:

1.- TOMAR CONCIENCIA

Utiliza todos los colores del arco iris a la hora de elaborar tu comida ya que con ello te aseguras que no sólo obtienes todos los beneficios a nivel de antioxidantes sino que tu ingesta en nutrientes será de gran valor.

Además de ello, presta atención cuando cocines a las características físicas de los alimentos que ingieres como su textura, sabor, olor, temperatura. Ello va a hacer que te sientas satisfecho después de una buena comida.

2.- CUIDA TUS EMOCIONES

El cerebro humano está diseñado para sobrevivir e intentará defenderte de situaciones de pánico. Por eso es muy importante que tu estado de ánimo a la hora de comer no esté en modo supervivencia y evitar situaciones de miedo o ansiedad. En estos casos casi es preferible no tomar nada, ya que es posible que nuestro cuerpo se sienta agredido y nuestro intestino no sea capaz de digerirlo y absorberlo.  También puede ocurrir que, por el contrario, sientas unas ganas irrefrenables de comer y no seas consciente de la cantidad que estás ingiriendo, pudiendo llegar a provocarte vómitos o diarreas. Créeme, cuando te digo que no es la manera ideal para nuestra digestión. Nuestro instinto natural va a saber que no es saludable.

Aconsejo tomar unas respiraciones profundas para hacerte consciente del acto de la comida, o incluso puedes entrar en un estado meditativo para desarrollar un hábito alimenticio saludable. Comer acompañado de sus seres queridos y mantener conversaciones agradables mientras coma te ayudará a estar en un estado de relajación.

Una de las consecuencias de comer en un estado de estrés es que nuestro sistema digestivo segrega jugos gástricos que nos provocan acidez y si se mantiene por un largo periodo pude tener consecuencias graves de salud.

3.- SIÉNTATE DERECHO

Nuestro sistema digestivo está claramente organizado para que la gravedad ayude en el proceso de mover los alimentos. Básicamente, ponemos comida cerca de la parte superior de nuestro cuerpo y los desechos salen cerca de la parte inferior de nuestro torso.

Muchas personas a lo largo de los siglos han afirmado que sentarse con la espalda recta durante y después de una comida ayuda a la digestión de los alimentos y reduce el riesgo de dolencias en tu sistema digestivo. Éste es un buen hábito alimenticio saludable.

4.- MASTICA DESPACIO

El acto de la masticación significa que estamos contribuyendo a descomponer la comida para que, al llegar a nuestro estómago, éste tenga que trabajar menos. Eso hará que la comida se digiera mejor y no necesite utilizar muchos jugos gástricos. Por el contrario, si ingieres un trozo de comida casi sin masticar, eso hace que tarde más en llegar al estómago y nuestro sistema digestivo tiene que hacer más trabajo por lo que la digestión se ralentiza.

Además, nuestra saliva descompone químicamente los carbohidratos de nuestra comida. Es por eso que los alimentos ricos en carbohidratos como las verduras y los cereales tienen un sabor más dulce después de haber estado en la boca durante un tiempo.

Intente masticar la comida hasta que se sienta como un líquido en la boca. Esto puede requerir treinta, cuarenta, cincuenta masticaciones o más dependiendo de la comida. Cuando haces esto, notarás que tu ingesta será menor ya que te empiezas a sentir satisfecho por lo que comes sólo lo necesario. Anota cómo te estás sintiendo y si esto evita que tengas que comer antes de la siguiente comida. Incorpora el masticar un mínimo de 50 veces cada bocado por comida como hábito de comida saludable.

5.- COME LENTO

Comer despacio y espaciar las comidas durante más tiempo te ayuda durante el proceso de la digestión. Puedes hacer del acto de comer una diversión y no hacerlo como para salir del paso y estar pensando en ir a hacer otra cosa y terminar rápido. Si disfrutas mientras comes y además te diviertes con tus amigos, el placer será inmenso y una fuente de satisfacción.

6.- ¿BEBER?

Si tienes un metabolismo lento, beber durante o cerca de una comida puede retrasar el proceso digestivo, s digestivos, lo que dificulta la una digestión adecuada de los alimentos para algunas personas. Empezar una comida tomando líquido que contiene nutrientes, como por ejemplo un caldo, sopa o infusión, llena nuestro estómago durante más tiempo, ya que retenemos el líquido en el estómago mientras descomponemos los nutrientes. Esto te ayuda  a sentirte lleno, satisfecho y saciado por más tiempo.

7.- RESPIRA

Podemos dejar de comer durante meses, beber durante días pero respirar sólo unos minutos. Al respirar estamos masajeando el abdomen y con ello nuestros intestinos y diafragma. Para hacer esto, hazte consciente mientras exhalas y tu abdomen se relaja y empújalo hacia afuera mientras inhalas. Masajear tu abdomen a través de la respiración te ayuda a mover los alimentos más fácilmente, reduciendo el riesgo de estancamiento de alimentos.

8.- HACER EJERCICIO

Camina después de comer ya que te va a resultar más fácil la digestión al ayudar físicamente a mover los alimentos a través de nuestros intestinos. Mientras caminas, recuerda masajear tu colon ascendente, transverso  y descendente y esto contribuye a ayudar a la acción peristáltica de mover los alimentos.

9.- ESTÍRATE

Haz algunos estiramientos abdominales suaves una o dos horas después de una comida. Ponte de pie y estira lentamente a cada lado para mover tu colon ascendente y descendente. Inclínate hacia atrás y luego hacia adelante lentamente para mover tus intestinos. Prueba esto tendido de frente o de lado para que sea más relajante.

Conocer los 9 hábitos para una buena digestión, merece la pena, CRÉEME.