¿CÓMO FORTALECER EL SISTEMA INMUNE EN TIEMPOS DE CORONAVIRUS?

Si partimos de la base de que la salud es nuestro estado natural, el cuerpo humano está diseñado perfectamente para vivir durante unos cientos de años. ¿Por qué entonces enfermamos?

El sistema inmunológico es un sistema natural del organismo diseñado para protegernos ante los agentes externos como patógenos, virus y bacterias no beneficiosas. En realidad somos un trillón de bacterias, es decir, nuestros antepasados, las primeras formas de vida fueron virus y bacterias. Algunas son beneficiosas y otras no lo son. Algunas nos nutren y otras no. El sistema inmune es ese que sabe diferenciar cuáles son las bacterias y cuáles son los microorganismos que nos asisten en la vida y cuales nos perjudican. Cuando perdemos esa capacidad inteligente que tiene el organismo, esa barrera de protección se vuelve vulnerable y permite que entren.

¿Qué podemos hacer entonces para fortalecer el sistema inmune?

En nuestro sistema inmunológico están la gran mayoría de microorganismos que nos van a llevar a tener una alcalinidad, una buena absorción de minerales y que van a mantener nuestro sistema inmune en forma y fuerte. Trabaja en conjunto con los pulmones y la piel. Intestinos, pulmón y piel son tres órganos de eliminación y de intercambio. Elimino dióxido de carbono y absorbo oxígeno. Yo tomo el alimento y elimino a través de las heces. Yo absorbo oxígeno, Elimino dióxido de carbono. Cuando esos dos organismos están saturados yo elimino a través de la piel.

Si nos cercioramos de tener una alimentación equilibrada es como vamos a mantener nuestros intestinos saludables. Porque es justamente en nuestros intestinos donde empieza la salud, así que si queremos mantenernos vitales, recuperarnos de cualquier patología, el sistema digestivo es el principal para gozar de una protección contra los virus.  Pues desde un punto de vista biológico, nuestros intestinos  son como nuestras raíces, y tienen la misma función en el cuerpo humano que las raíces de las plantas tienen para su propia salud.

Hablando desde los conceptos milenarios de la medicina china y la macrobiótica, considerando que el padre de la Medicina fue Hipócrates que dijo que el alimento que tomamos nos afecta en todas sus formas y todo está en proporción relacionado con lo que nos rodea. No hay nada que quisiéramos que no me afectara a mí y al medio ambiente y que no había nada que le hiciéramos al medio ambiente y que no me afectara a mí. Según la visión clásica de la Medicina Tradicional China todo está conectado. El sistema inmunológico está comprendido por el sistema linfático y el 70% del sistema inmunológico ocurre en los intestinos.

Fortalecer sistema inmune

¿Cómo podemos subir el sistema inmunológico?

Tener una buena flora intestinal es fundamental. Y para ello, hemos de elegir una alimentación inteligente. Es aquella que tiene un equilibrio entre proteínas, hidratos de carbono, grasas, minerales y vitaminas. Hay muchas dietas y criterios de alimentación inteligente, yo propongo hacerlo desde la macrobiótica. Ya que ésta se basa en tomar cereales integrales en grano, que son una buena fuente de hidratos de carbono complejos, una buena calidad de proteína vegetal como legumbres y un 50% de la dieta diaria compuesta por verdura y fruta de temporada que nos proporcionen fibra, vitaminas y minerales. No obstante, hay veces que se hace necesaria la suplementación porque hay organismos más degastados.

Os hago una reflexión. ¿Cuáles son las necesidades básicas? Respirar, descansar, comer. La comida es algo que hacemos a diario y desde aquí podemos poner conciencia para favorecer al organismo y prevenir enfermedades.

La desconexión que se ha producido con la naturaleza es la que nos ha llevado a esto. Por lo tanto, es volviendo a lo simple y natural como podemos encontrar la solución.

En cada problema está contenida la solución. Si tomamos proteína animal, estamos saturando el sistema linfático y obstaculiza al sistema inmunológico. La carne atasca los intestinos, se come una gran parte de nutrientes del cuerpo para poder ser metabolizada. Es un alimento de lujo a nivel orgánico y a nivel planetario no es sostenible. Comer carne acaba con los intestinos y nos acidifica. El cuerpo es una máquina perfecta, va a buscar el equilibrio para alcalinizar y por lo tanto utiliza el calcio y se van agotando las reservas del cuerpo.

Cuando consumimos hidratos de carbono simples como arroz blanco, pan blanco, azúcar, lo que hacemos es lapidar el almacén de minerales del cuerpo. Y los azúcares simples también acaban con nuestra despensa de minerales. Los lácteos nunca llegamos a digerirlos bien, pasan los patógenos directamente a la sangre.

Una de las cosas para tener el sistema inmunológico alto es la respiración y absorber el aire puro.

Cómo vamos a subir el sistema inmune, incrementando minerales y microorganismos que colonicen los intestinos.

TU VACUNA ES MANTENER EL SISTEMA INMUNOLÓGICO ALTO

Pensamiento positivo, la actitud ante la vida y una buena actividad física además de buenos hábitos saludables nos garantizan una vibración alta y una protección ante los patógenos, virus y bacterias dañinos.

PAUTAS PARA FORTALECER EL SISTEMA INMUNOLÓCIO

  • Respirar de manera consciente. Tomar al menos 5 minutos cada día para respirar profundo. Con ello trabajas pulmones, piel e intestino grueso. Llevamos oxigeno al organismo.
  • Abandonar el miedo. El miedo te hace ser un blanco por lo que subir la vibración a través de la gratitud es una buena práctica para hacer a diario. Agradece el don de la vida y todo lo que tienes en este momento.
  • Comer de manera inteligente. Elige una alimentación basada en comida real, de temporada, local y ecológica. Tomar los alimentos lo más naturales posibles, sin conservantes. La calidad de los alimentos que ingerimos proporciona una buena calidad de sangre.
  • Actividad física. Hay tanto donde elegir, desde caminar al aire libre, practicar yoga, tai chi, estiramientos, montar en bicicleta, etc. Hacer aquello que nos produzca placer, alegría y estimule nuestro sistema inmune.
  • Higiene a través de frotar el cuerpo a diario. Puedes utilizar una toalla pequeña en seco o ligeramente húmeda y caliente. También un guante de crin. Así permites que el cuerpo se oxigene a través de los poros de la piel.
  • Higiene electromagnética. Desintoxicarnos de las pantallas, pasar menos horas con el móvil, ordenador, televisión.

 

En definitiva, se trata de simplificar la vida y volver a conectarnos con Gaia.